Aquél hombre se
plantó delante de mí con la intención de asegurarme y convencerme de que una
persona entraría en mi vida para cambiarla, pero no especificó si para bien o
para mal, simplemente me dio aquella indicación y se esfumó como si todo
hubiese sido producto de mi imaginación. Me sentí una lunática. La verdad es
que ya me daba igual lo que pasase con mi vida, ya vivía todos los días iguales
que el anterior, nada me parecía interesante, solo sentía que mi cuerpo era la
rama seca que se desprendía de un gran árbol lleno de luz y se desvanecía en un
gran pozo oscuro y aparentemente sin fondo, que ya ni chillaba reclamando un
rescate.
Los peores pozos son los que tienen fondo. En estos no hay rescate que valga. En los sin fondo, no hay peligro. Al final saldrás por el otro lado y sin mojarte.
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exacto^^
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